Los agujeros negros son considerados como regiones en el espacio con densidad infinita en la cual aquello que se aproxima demasiado (luz o materia) es atraído hacia el interior donde es compactado para nunca más ser visto. Siempre han sido observados de manera indirecta, midiendo los niveles de Rayos Gamma y Rayos X que emiten.
Este concepto fue ampliado por el científico Stephen Hawking a principios de 2014, según el, los agujeros negros no existen de la manera en que lo conocemos, si bien no podemos observar lo que sucede en las cercanías del núcleo debido a que la gravedad es tan abrumadora que ni la luz puede escapar, no existe ninguna singularidad física, la materia que es absorbida permanece un tiempo dentro de un horizonte de sucesos aparente y luego es expulsada de manera desordenada a través de chorros de energía. A pesar de que esto contradice muchas creencias con respecto a estos cuerpos celestes, la verdad no es una teoría para nada disparatada.
Desde su descubrimiento hace ya varias décadas, la teoría de que estos fenómenos no emitían luz apreciable por algún método convencional era la más acertada. Sin embargo, un equipo de la Universidad de Kyoto, revelaron que existen agujeros negros que se encuentran relativamente cerca de la tierra, son capaces de emitir luz visible.
Personal de la JAXA (Agencia Espacial Japonesa) participaron en el estudio e informaron que los agujeros negros luego de largos periodos de tiempo, entran en una fase mucho más activa, despidiendo enormes cantidades de energía. Este comportamiento cíclico es común en cuerpos celestes, nuestro sol también presenta estos ciclos de actividad.
La observación de un agujero negro, por lo general, son estudiados haciendo uso de telescopios que puedan observar los Rayos X, sin embargo, en esta oportunidad la radiación electromagnética emitida está en el rango de la luz visible y pudo ser apreciada por telescopios ordinarios.
Algunos Antecedentes
Hasta la fecha solo se había observado luz visible de los cuásares. Estos no son muy diferentes a un agujero negro, presentan una nube de gas en su cercanía llamado “disco de acrecimiento”, la materia se mueve a velocidades insólitas debido al campo gravitatorio ocasionando una fricción tan alta que alcanzan temperaturas extremadamente altas haciendo que su radio espectral se desplace hacia el rojo y volviéndose visible para nuestros telescopios.
V404 Cygni fue el agujero negro estudiado debido a que su cercanía con la tierra. Los científicos notaron la presencia de luz visible de manera intermitente, esta podía apreciarse durante algunos minutos o varias horas. Concluyeron en que los Rayos X originaban estos destellos de luz visible debido a que estos calientan la materia a tal grado que esta irradiaba radiación electromagnética apreciable para el ojo humano.
Nuevos Entusiastas
Este descubrimiento permite que curiosos y aficionados puedan observar desde la tierra agujeros negros con un telescopio convencional con un lente de poco más de 20cm. La Sociedad de Astronomía del Caribe (SAC) afirmo que existen mapas y programas de ayuda que permiten ubicar estos cuerpo en el espacio, aunque también aclaro, que no esto no implica que baste solo con apuntar nuestros telescopios al cielo podrán observar la actividad, esto solo ocurrirá el instante en que el espectador apunte su telescopio y en el que el agujero negro entre en una fase de mayor actividad coincidan.
Posiblemente en los próximos meces entusiastas de la astronomía observen y fotografíen estos rayos visibles, de esta manera tendríamos una representación más realista de los agujeros negros. Leer más