¿Alguna vez te han llamado Dory? Como referencia a la facilidad con que algunas veces olvidamos ciertas cosas. La verdad, es que muchas personas tienen problemas con la memoria de corto plazo y pasan completamente por alto algunas cosas en el día a día. Esto tiene un origen multi-causal dentro de los que podemos destacar, el estrés diario y la falta de organización personal.
Existen el mercado muchas vitaminas y suplementos que le dan una ayuda a nuestro cerebro para mantenernos activos y frescos. La hormona del estrógeno juega un papel protagonista a la hora de mantener sano nuestro cerebro y permitir la formación de recuerdos más duraderos, con la edad este efecto se ve disminuido en las mujeres.
Descubrimiento
Un equipo en la Universidad de Florida intenta mejorar el efecto de disminución de estrógeno, para ello están desarrollando una terapia génica en ratones de laboratorio con el fin de devolver la flexibilidad en la memoria.
La hormona del estrógeno ayuda a nuestro cerebro a crear y reforzar las conexiones mediante un proceso conocido como plasticidad neuronal, estas conexiones a su vez están encargadas de facilitar el proceso de aprendizaje y en conservación de los recuerdos, lo que se traduce en una memoria sana. La disminución del estrógeno puede traer como consecuencia la perdida plasticidad y por ende, perdida en la capacidad de memoria.
El paso del tiempo deja secuelas en el cuerpo y la disminución de estrógeno en las mujeres es una de ellas, sobre todo en la etapa de la menopausia. Es en este punto en que los científicos creen que la terapia hormonal tendrá mayor efectividad a la hora de proteger el cerebro, también incluye a enfermedades nuerodegenerativas como el Alzheimer, aunque llega un punto en que el tratamiento pierde su efectividad que está comprendido a partir de los 65 años.
¿En que consiste el proceso?
El procedimiento consiste básicamente en la estimulación mediante estrógeno de dos receptores ubicados en el hipocampo. El experimento se probó en ratones de laboratorio envejecidas, se dividieron los animales en dos conjuntos de tres grupos, siendo un grupo de control y dos en los que se estimularían los receptores ya mencionados. Un grupo de animales fue tratado con terapia genética mientras que otro recibió estrógeno como parte de la terapia. Estos últimos presentaron mejoras notables en su memoria y se les asigno el nombre de grupo receptor alfa.
Aunque de momento solo se cuentan con pocos resultados, no deja de ser un primer paso que puede marcar un avance muy importante para desarrollar tratamientos alternativos al reemplazo hormonal y que podría traer una serie beneficios más allá de mejorar la memoria.
Posibles Beneficios
A corto plazo, el descubrimiento ayuda a entender como el estrógeno influye en el cerebro hasta el punto de conservar la memoria y prolongar la juventud del mismo. Por otro lado, a largo plazo el hallazgo puede darnos los conocimientos necesarios para dejar el reemplazo hormonal a un lado y trabajar de manera directa con los receptores que le dan plasticidad al cerebro.
De momento los investigadores pretender seguir realizando avances que mejoren la comprensión del funcionamiento del cerebro y aprovechar el receptor alfa para mejorar la condición de algunos pacientes.